El pasado 4 de mayo, Wilfredo –un pequeño empresario cafetalero que pidió reservar su identidad– intentó acceder a un crédito de S/189 mil en el banco Scotiabank, en el marco del programa Reactiva Perú, creado para ayudar a todo tipo de empresas durante la pandemia. Sin embargo, 18 días después, un sectorista de la entidad financiera lo llamó para informarle que solo atendían “a clientes que tienen productos con el banco, es decir, créditos vigentes”, a pesar de que este no es un requisito establecido en la norma.
“No tenemos deudas, el reporte de Sunat es impecable y se trata de una pequeña empresa formal, pero nos negaron [el crédito]. Hace 20 días presentamos otro pedido al banco BBVA, y solo nos dicen que está en evaluación en el departamento de riesgos. Lo más probable es que nos contesten lo mismo. Creo que estan poniendo filtros indebidos”, dijo Wilfredo a OjoPúblico. Su empresa alcanzó una facturación de S/2 millones el 2019, y actualmente busca obtener liquidez para reiniciar la cosecha del café que está en plena temporada.
Precisamente, la semana pasada este medio informó que el 36% de las beneficiadas en la primera etapa de Reactiva Perú eran compañías con ingresos anuales superiores a los S/60 millones. En tanto, las medianas y pequeñas empresas (Pymes) alcanzaron el 51% de los préstamos, las Micro y Pequeñas (Mypes) el 11%, y los negocios que solo pidieron S/30 mil para sobrevivir, apenas recibieron el 0,8%.